Imagínate ir justo de tiempo y tener listo en 15-20 minutos una auténtica paella de Levante, un arroz caldoso, un risotto de setas o una sopa bullabesa. Gracias a Querida Carmen, puedes dejar de imaginártelo y probarlo por ti mismo. A pesar de su corto recorrido, ya es una de los más prestigiosas marcas de comida semicocinada de España. De hecho, sus famosas «latas» han tenido tanto éxito que se consumen hoy en día en sitios tan lejanos como Japón.
No hace falta que pierdas tiempo en hacer una paella o una fideuá, que vayas a por los ingredientes y que te pegues horas en la cocina. Todo eso ya lo hace por ti Querida Carmen, tu solo finalizas el plato (y de paso te llevas todo el mérito 😉 )
Puedes disfrutarlo en solitario, invitar a tus amigos o sorprender a tus familiares con un auténtico platazo de cuchara. Además, todo ese tiempo que te ahorras lo puedes destinar a cualquier otra tarea. Más fácil, imposible.
Querida Carmen surge en Barcelona en 2009 de la mano de Marc Creus, un joven emprendedor con el paladar lo suficientemente adiestrado como para saber apreciar como se merece la buena comida. La idea del proyecto le vino al poco tiempo de independizarse, cuando empezó a malcomer por el carrusel de actividades diarias que llevaba a cabo. ¿Por qué renunciar a comer bien?, pensó. La respuesta a su pregunta fue crear una selección de platos llenos de sabor, con buenos ingredientes y fáciles de preparar.
El nombre es toda una declaración de intenciones. Es un homenaje a su abuela Carmen, uno de los símbolos culinarios de su familia y al mismo tiempo es un reconocimiento a todas las mujeres españolas que han honrado a la tradición gastronómica del país con sus recetas tradicionales.
Los diferentes platos se elaboran en Fraga por un equipo de cinco personas a cuyo mando está el chef Ángel Bosch. Una vez se terminan de hacer, se pasteurizan para dejar el envase estanco y seguro durante, por lo menos, un año y medio. Durante este tiempo no pierde ninguna de sus propiedades. Las raciones son habitualmente para 2-3 personas.
No es de extrañar que la popularidad de Querida Carmen haya ido incrementado rápidamente hasta llegar a sitios como Japón, donde han encontrado en sus productos la forma más auténtica de probar los platos típicos de España.
En cada una de las latas, llamativas por su diseño, se puede encontrar los ingredientes necesarios para ejecutar el plato fácilmente en pocos minutos, todos ellos naturales y sin conservantes ni colorantes.
Por ejemplo, en el caso de la paella viene una pequeña lata en el interior del envase con el caldo y el marisco, además del correspondiente saquito. Sólo hay que ponerlo en el fuego, dejar que el arroz «chupe», remover y listo. Cocer y cantar.
No hace falta que pierdas tiempo en hacer una paella o una fideá, que vayas a por los ingredientes y que te pegues horas en la cocina. Todo eso ya lo hace por ti Querida Carmen, tu solo finalizas el plato (y de paso te llevas todo el mérito ).
Fuente: Entrevista en La Expansión
¿Sabías que casi un tercio de los alimentos que producimos en el mundo se desperdician?… Read More
El teff es un cereal antiguo que ha ganado popularidad en los últimos años por… Read More
lEl pimentón de La Vera es una especia con denominación de origen protegida (DOP), producida… Read More
¿Conoces los distintos tipos de leche vegetal? En los últimos años, el consumo de leches… Read More
Los pickles o encurtidos han existido durante siglos, pero en los últimos años han experimentado… Read More
En el mundo de los aperitivos y los entrantes rápidos, las palmeritas de jamón y… Read More