¡Que te den castaña! Pero de la buena. Como ya hemos hecho con otros productos como cerezas o patatas, en mentta te explicamos toda la información sobre la castaña que tienes que saber, respondiéndote a preguntas como: ¿cuándo es la temporada de la castaña?, ¿cuál es es el origen de la castaña? o ¿dónde comprar la mejor castaña?
La castaña, como seguro sabes, es el fruto del castaño (Castanea sativa), uno de los árboles más altos del planeta que es nativo de climas templados del hemisferio norte. El fruto es una cápsula subglobosa muy espinosa que contiene usualmente 2-3 aquenios que son las castañas propiamente dichas.
Algunos historiadores sugieren que la castaña proviene de las zonas de Anatolia, Balcanes y Cáucaso, siendo utilizada ya por nuestros antepasados nómadas desde hace 100 mil años. Era una importante fuente de calorías para el hombre prehistórico.
Las castañas fueron una importante fuente de alimentación en el sur de Europa, en el sudoeste y este de Asia y también en el este de Norteamérica, antes de la plaga de la castaña (¡sí, hubo una plaga de la castaña!). Durante la Edad Media, en el sur de Europa, las comunidades que habitaban cerca de bosques de castaños y que tenían escasez de acceso a la harina de cereal, utilizaban las castañas como principal fuente de carbohidratos.
El principal productor de castañas es China, con cerca del 25 % de la producción mundial, destinada mayoritariamente al consumo interno. Otros productores importantes son Corea del Sur, Italia y Turquía. Dentro de España las zonas de mayor producción son Galicia, Málaga, y el Bierzo.
Pero vamos a lo que importa, ¡qué ricas están las castañas! A más de uno nos encantaría comer este fruto hasta tener un cólico y a ser posible, durante todo el año. Pero lo cierto es que al ser un producto de temporada, es un poco complicado llegar a este idílico sueño y comerlas cuando nos apetece. En España, la temporada va de octubre a diciembre aproximadamente.
Es uno de los productos estrellas en la festividad de Todos los Santos al celebrarse en pleno otoño. Pero no desesperes si estás en primavera o en verano porque…. ¡se pueden conservar las castañas! Sí, has leído bien. Puedes congelarlas o ponerlas en almíbar entre otras opciones para conservarlas y así disfrutarlas todo el año.
En mentta tenemos la suerte de contar con Productos del Bierzo, una tienda especializada en productos de dicha comarca leonesa y que vende auténtica M.G. Castaña del Bierzo, es decir, una castaña con marca de garantía, lo que indica la alta calidad del producto. Puedes comprar castañas tanto en la web como en la app de mentta.
Aunque las castañas se coman frescas, están englobadas dentro del grupo de los frutos secos y se trata de un elemento muy nutritivo que puede comerse de infinitas formas: asadas (nuestra favorita), crudas, cocidas, confitadas, en almíbar… Os dejamos este artículo que detalla varias recetas de castañas.
¿Alguna vez te has preguntado a quién se le ocurrió asar unas castañas por primera vez? Esta es una leyenda de tierras salmantinas que nos cuentan en este artículo, pero que da buena cuenta de la capacidad energética de este pequeño producto.
Había una vez un grupo de mozalbetes que se encontraban deambulando por el monte. Aquella jornada de finales de noviembre anocheció más rápido de lo habitual y la temperatura bajó cual canto rodado por la ladera más empinada. Los jóvenes se encontraban aún lejos de casa y el húmedo frío comenzaba a colarse por sus entrañas, así que decidieron improvisar una hoguera para calentarse a mitad de trayecto y aguantar hasta poder alcanzar el hogar. Pero había un problema, toda la leña alrededor estaba mojada.
Pensaron en correr hacia casa, pero la fatiga les hubiera provocado una sudadera capaz de derivar en pulmonía. Estaban a punto de arrojar la toalla cuando uno cayó en la cuenta de que podían quemar las castañas que habían recogido. Estaban secas, dentro de un zurrón, y podrían prender como la madera.
Sobre la hojarasca seca colocaron varios puñados del fruto y, esta vez sí, la chispa ardió. Al momento se generó una pequeña fogata que comenzó a proporcionarles calor. Sin embargo, en lugar de prenderse, las castañas terminaban por abrirse y saltar. Uno de los jóvenes se acercó una castaña a la boca para probarla. “¿Desde cuándo las castañas se comen como la carne?” le recriminó otro. Pero hizo caso omiso. Nada más saborear la castaña asada, el valiente comensal brincó con fuerzas renovadas. Era algo milagroso. De repente se sentío lleno de energía.
Al verlo, sus compañeros hicieron lo propio, obteniendo así las fuerzas necesarias para regresar hasta el pueblo sin mayores problemas. Desde entonces, se dice que comer siete castañas pasadas por fuego durante los últimos días de noviembre atrae la energía de la tierra hacia el cuerpo y la fortaleza al alma.
Ahora que ya sabes toda la información sobre la castaña aprovecha octubre, noviembre y diciembre para comprar castañas de temporada. Si las quieres el resto del año, acuérdate de que es posible conservarlas. ¡Ah! Y si aún no has probado las espectaculares castañas del Bierzo que hay en mentta es tu oportunidad.
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