{{getOldPrice()}}{{getPrice()}}
¡ Comprando este producto consigues {{calculatedProductMenttos()}} menttos !
Disfruta del auténtico sabor del Jamón de Bellota 100% Ibérico Carrasco, cuidadosamente loncheado a cuchillo por maestros cortadores para mantener toda la esencia, jugosidad y textura del mejor jamón ibérico.
Presentado en cómodos sobres de 80 gramos, ideal para degustar en cualquier ocasión con la máxima calidad y frescura garantizadas.
Elaborado a partir de cerdos 100% ibéricos criados en libertad en las dehesas de Guijuelo y alimentados con bellota durante la montanera, este jamón es una de las joyas gastronómicas de la marca Carrasco, reconocida por su tradición familiar y por ofrecer productos ibéricos de alta gama desde 1895.
Su corte a cuchillo permite que cada loncha conserve su aroma, sabor y veteado característico, respetando la textura y el punto óptimo de curación.
Vista: Lonchas finas de color rojo intenso con vetas blancas de grasa infiltrada, brillante y sedosa, señal de una curación lenta y natural.
Nariz: Aromas intensos y elegantes, con notas a frutos secos, bellota y suaves matices especiados, que recuerdan a la dehesa y la montanera.
Boca: Textura suave, untuosa y jugosa. Sabor profundo, equilibrado, con un perfecto balance entre dulzor y salinidad, y un persistente retrogusto a frutos secos y hierbas aromáticas.
Disfruta del auténtico sabor del Jamón de Bellota 100% Ibérico Carrasco, cuidadosamente loncheado a cuchillo por maestros cortadores para mantener toda la esencia, jugosidad y textura del mejor jamón ibérico.
Presentado en cómodos sobres de 80 gramos, ideal para degustar en cualquier ocasión con la máxima calidad y frescura garantizadas.
Elaborado a partir de cerdos 100% ibéricos criados en libertad en las dehesas de Guijuelo y alimentados con bellota durante la montanera, este jamón es una de las joyas gastronómicas de la marca Carrasco, reconocida por su tradición familiar y por ofrecer productos ibéricos de alta gama desde 1895.
Su corte a cuchillo permite que cada loncha conserve su aroma, sabor y veteado característico, respetando la textura y el punto óptimo de curación.
Vista: Lonchas finas de color rojo intenso con vetas blancas de grasa infiltrada, brillante y sedosa, señal de una curación lenta y natural.
Nariz: Aromas intensos y elegantes, con notas a frutos secos, bellota y suaves matices especiados, que recuerdan a la dehesa y la montanera.
Boca: Textura suave, untuosa y jugosa. Sabor profundo, equilibrado, con un perfecto balance entre dulzor y salinidad, y un persistente retrogusto a frutos secos y hierbas aromáticas.