Uno de los anhelos de cualquier amante de la buena comida es sorprender a sus invitados con su sello gastronómico personal para pasar un buen rato sin que haya ninguna excusa que pueda arruinar el momento. Desde mentta nos declaramos fans incondicionales del queso, por eso creemos firmemente que si uno sabe cómo hace una buena tabla de quesos podrá convertirse en el perfecto anfitrión.
1ºLo primero, la idea antes de hacer la tabla de quesos
El primer paso que hay que tener claro es que para conseguir una buena tabla de quesos necesitamos un balance equilibrado de sabores, texturas, colores y tamaños.
2º ¿Dónde comprar los quesos?
Lo siguiente que tenemos que hacer es acudir a una tienda especialista en quesos que nos garantice calidad y variedad. Lo ideal es comprar directamente a productores o queseros porque además de conocer el queso de primera mano, suelen dar consejos al cliente en función de sus gustos. Y eso no es algo tan fácil como parece.
Quesos de la Huz y su queso Don Cayo, uno de los manchegos de más renombre en España ¿Quieres probarlos?Si esta opción no la tenemos a mano, siempre cabe la opción de recurrir a tiendas online como mentta o supermercados especializados donde sepamos que el género cumple las expectativas.
3º ¿Qué quesos tenemos que usar en la tabla?
En inglés hay una rima que va de maravilla para aplicar a nuestra tabla: “Something old, something new, something goat, and something blue.”
«Old» hace referencia a quesos curados como cheddar, parmigiano-reggiano, gruyère o Gouda. Cuanto más tiempo de curación tenga el queso, más duro y quebradizo estará. Además, suelen ser quesos más salados y de un sabor más intenso. Pero recuerda, una pequeña diferencia en un queso curado o viejo puede
En el caso de quesos como el Brie o Camembert, ambos con suave y cremoso sabor gracias al hongo que recubre su superificie, se acentúa el sabor de su parte central cuanto más tiempo de maduración tiene.
«New» es un guiño a los quesos de corta maduración como la mozzarrella, la burrata, la ricotta o el mascarapone. Tienen todos un tono blanco y una textura blanda muy características. También podrían incluirse quesos como el feta o el fresco aunque bien es cierto que no son tan blandos y suaves sino más bien de una textura que se deshace con facilidad.
Did I just wake up in cheese heaven? This looks heavenly @castellocheesecanada
«Goat» es la traducción de cabra en inglés. Hay diferentes variedades en el mercado y por supuesto algunas son resultado de mezcla con queso de vaca. En España hay auténticas maravillas, como las que tiene Quesos de la Huz, aunque en Europa también tienen variedades deliciosas como el queso escandinavo gjetost.
«Blue» es una referencia clara al queso azul. Toda buena tabla de quesos que se precie debe incluir alguna variedad de queso azul, cuyo color es resultado de la acción de un hongo que se le añade. Cuanto más tiempo madure, más sabor tendrá.
4º¿Cantidad por persona?
Hay un consenso que apunta a 100-110 gramos de queso por persona y la mitad si se trata de niños.
5º¿Número de quesos?
Los profesionales recomiendan que sean de 3 a 5 variedades de queso, aunque esta cantidad puede ser menor, hasta se pueden hacer maravillosas tablas con una sola variedad.
6º ¿Temperatura adecuada del queso?
Tenemos que sacarlo media hora o una hora antes de su consumo. ¡No puede estar frío!
Si queremos que no se seque, podemos poner un paño humedecido con aceite de oliva.
7º ¿En qué orden hay que colocar (y comer) la tabla de quesos?
Hay que colocarlos de menos a más fuerte en el sentido de las agujas del reloj. En la medida de lo posible, debemos alejar los quesos más fuertes y olorosos de los que son más suaves para que no haya una contaminación organoléptica.
8º ¿Y para acompañar los quesos?
Aunque un simple trozo de queso puede ser maravilloso en nuestro paladar, tenemos que acompañarlo con algo más. Desde una simple tostada de pan untada en aceite hasta crackers de sabores, las opciones son amplias y variadas en función de los gustos.
Para beber, lo más recomendable para el queso es un buen vinto tinto, pero tampoco es un sacrilegio acompañarlo con cerveza.
Fuente del artículo: Designmom
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