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Catar un vino Palacio de Lerma es disfrutar de cultura, naturaleza y arte en cada sorbo, reflejando el cariño en su elaboración.
Desde la viña hasta la botella, se cuida cada detalle para producir vinos potentes y equilibrados, con extracción de color y aromas.
Con barricas de roble francés y americano, se logra un vino elegante y de calidad en todos los aspectos.
BARBUDO está elaborado con sistema pigeage siguiendo nuestra filosofía de máxima extracción con la mínima intervención. Todos los trasiegos se han hecho con bomba peristaltica a baja velocidad. Ha permanecido 3 meses y medio en barricas de roble francés de segundo año de grano fino.
Graduación alcohólica: 13,6 % V
Acidez total: 4,6 g/L expresada en ácido tartárico.
PH= 3.9.
Barburdo: Servir entre 14 y 18 grados,
Fase visual: Es un vino de color picota y ribetes azulados, con una buena capa de color y se presenta limpio y brillante.
Fase olfativa: En nariz tiene una intensidad media-alta, destacan las notas frescas de mermelada de mora, y sutiles notas de madera (vainilla, brioche, torrefacto y algunas especias).
Fase gustativa: De entrada seca, llena la boca con una tanino noble que aunque se nota en la boca no es agresivo. Equilibrado en boca presenta una buena persistencia y estructura.
Es un vino que, aunque está apto para consumir para aquellos que les gusta el carácter de la madera, crecerá con el tiempo porque aún no ha alcanzado su máxima plenitud.
BARBUDO está elaborado con sistema pigeage siguiendo nuestra filosofía de máxima extracción con la mínima intervención. Todos los trasiegos se han hecho con bomba peristaltica a baja velocidad. Ha permanecido 3 meses y medio en barricas de roble francés de segundo año de grano fino.
Graduación alcohólica: 13,6 % V
Acidez total: 4,6 g/L expresada en ácido tartárico.
PH= 3.9.
Barburdo: Servir entre 14 y 18 grados,
Fase visual: Es un vino de color picota y ribetes azulados, con una buena capa de color y se presenta limpio y brillante.
Fase olfativa: En nariz tiene una intensidad media-alta, destacan las notas frescas de mermelada de mora, y sutiles notas de madera (vainilla, brioche, torrefacto y algunas especias).
Fase gustativa: De entrada seca, llena la boca con una tanino noble que aunque se nota en la boca no es agresivo. Equilibrado en boca presenta una buena persistencia y estructura.
Es un vino que, aunque está apto para consumir para aquellos que les gusta el carácter de la madera, crecerá con el tiempo porque aún no ha alcanzado su máxima plenitud.