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Origen
Australia
Ingredientes: Flores de hibisco (Hibiscus sabdariffa), azúcar de caña y agua.
Envase: Tarro de vidrio
Marca: FoodSelect International - Smederijstraat 2 4814 DB Breda (Holanda)
Peso: 11 Flores individuales 200 gr.
Las exquisitas flores de hibiscus en almíbar que encontraras en este llamativo tarro son perfectas para utilizar tanto en cócteles y bebidas sin alcohol, como en gran variedad de recetas culinarias puesto que no sólo son comestibles, sino que además sorprenden con un delicioso paladar similar a la frambuesa y una textura crujiente y carnosa, por lo que resultan de lo más versátil. En su sencilla preparación no se utilizan ni colorantes, ni conservantes ni aditivos artificiales, lo que las convierte en un producto cien por cien natural, perfecto para añadir un toque de elegancia y sofisticación en recetas tan diferentes como entrantes, postres o aperitivos.
Conservación: Conservar en un lugar fresco con una temperatura no superior a los 7ºC hasta 2 meses después de su apertura.
Información nutricional: Para 100 g | Valor energético 827kJ / 197 kcal | Carbohidratos 49,3g de los cuales azucares 46,1g | Fibra 3,1 g
Recomendaciones: Un original cóctel "Kir Royal" con tan sólo depositar la flor en el fondo de la copa y después verter el cava o champagne, sus pequeñas burbujas abrirán con suma delicadeza los pétalos de la flor., Nos encanta en sugerentes entrantes o brochetas., El toque gourmet para ensaladas de frutas o helados., Un exótico entrante rellenándolas con queso mascarpone, de cabra, mató..., Un aperitivo diferente una tostada flor de hibiscus, queso brie caliente y almendra.
El proceso de elaboración de las flores de hibiscus en almíbar comienza con una cuidadosa selección de las flores de mejor calidad, realizada una a una inmediatamente después de ser recolectadas, continua con el descorazonamiento y se pasa a su conservación en un ligero almíbar, a base de agua y azúcar de caña, totalmente natural, lo que permite dejar todo el protagonismo al sabor y los matices de los frutos. El resultado es el de unas flores de hibiscus con infinitas combinaciones tanto en gastronomía como en cocteleria, que no sólo destacan por su extraordinario paladar, también por el intenso color rojo y su espectacular belleza natural.