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Se sazonan uno o dos trozos de lóbulos con sal y pimienta, y se colocan directamente en el tarro. Este es el plato que por excelencia transmite el compartir un momento importante, quizás único, de la vida cotidiana.
Ingredientes: Foie Gras de pato (origen Gers - Francia), Sal, Pimienta.
Valores nutricionales medios por 100g: Energía 2170kJ/526Kcal; Grasas 54,6g de las cuales ácidos grasos saturados 23g; Hidratos de carbono 0,026g de los cuales azúcares 0,026g; Proteínas 8,41g; Sal 1,11g.
Sugerencias:
El foie gras es un gran aperitivo para una comida navideña, una fiesta de cumpleaños, un evento o un regalo personal durante todo el año. Permitir porciones de 50 gramos por persona. Coloque el frasco en el refrigerador 12 horas antes de la comida. Sacar del tarro, desengrasar suavemente con la punta de un cuchillo. Cortar en rodajas finas con una cuchilla caliente. Disponga el foie gras con sobriedad en un plato y déjelo en la mesa un cuarto de hora antes de servirlo, así estará a la temperatura adecuada para revelar todo su delicado sabor, sus aromas y que se derrita en la boca.
Nuestro foie gras entero del Gers para disfrutar con Pacherenc, Tariquet o Uby.
Los habitantes del Gers están muy apegados a su tierra y de generación en generación se transmiten historias y anécdotas en torno a este producto. Es el caso de este:
Los habitantes de Gers están muy apegados a su tierra y generación tras generación se transmiten historias y anécdotas sobre este producto
¡Una leyenda local cuenta que, tras conquistar las Galias, el general romano Cayo Julio César, hoy conocido como Julio César, emprendió una gira de inspección por las tierras recién conquistadas. Un criador de patos que vivía en el actual Gers, al enterarse de la próxima visita del conquistador, lo invitó a comer a su mesa. Le sirvió el hígado de un pato que había engordado durante mucho tiempo, declarando que era una especialidad local, y esperando así envenenar al dictador. Cuenta la leyenda que, lejos de disgustarse, el paladar de Julio César quedó seducido por este plato y pidió a su anfitrión que le proporcionara más para que se sirviera regularmente en su mesa. Así nació la tradición del foie gras de pato del Gers.
Aunque no hay pruebas que apoyen esta leyenda, es una historia que gusta de ser contada durante las comidas familiares. Pero, esta historia está ligada a la de la paradoja del Gers.
La paradoja del Gers
La paradoja del Gers
Como la vida de Julio César terminó prematuramente, nadie sabe qué efectos habría tenido en su salud el consumo regular de foie gras de pato de Gers. Pero hoy los científicos están sorprendidos por la extraña paradoja de Gers. Nuestro departamento es el que tiene la mejor esperanza de vida, y esta paradoja se debería a la grasa de pato presente en la dieta local. Así, los ácidos grasos contenidos en esta grasa prevendrían las enfermedades cardiovasculares. Si la leyenda es cierta, entonces Julio César podría haber disfrutado de una longevidad excepcional.
Este es un argumento de peso para el uso de la grasa de pato
Es por estas dos historias que el foie gras ocupa un gran espacio en el corazón de los habitantes de Gers. Es el símbolo de la buena comida, de una cultura y una forma de vida que permite mantenerse alegre y saludable.
Es el símbolo de una cultura y una forma de vida que permite mantenerse alegre y saludable
