Cada single malt de The Macallan revela el compromiso inigualable con el dominio de la madera y la destilación por el que se conoce a The Macallan desde que fue fundada en 1824. Es una expresión de nuestro deseo permanente de ir más allá de lo ordinario, de buscar lo extraordinario y de crear single malts inigualables.

Con el compromiso inquebrantable de conseguir que las barricas de jerez sean una parte fundamental del single malt de The Macallan, nuestra reputación por buscar lo extraordinario sirve como testimonio de las excepcionales barricas de roble en las que dejamos madurar nuestro espirituoso. Obtenidas, elaboradas, tostadas y sazonadas bajo la atenta supervisión del Master of Wood de The Macallan, estas barricas cuidadosamente seleccionadas cumplen las exigentes especificaciones del Master Distiller de The Macallan y su equipo.

Una vez rellenadas, el espirituoso envejece sin perturbaciones en las mismas barricas durante los años que hacen falta a fin de que sea merecedor de la expresión The Macallan para la que está destinado. Estas barricas de roble son las que más contribuyen para conseguir la calidad, el color natural y los aromas y sabores característicos que se encuentran en la esencia de un single malt de The Macallan.