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Chivas Minzunara se inspira por el discernimiento y arte japonés integrado en el mundo del whisky. Es una verdadera muestra de la colaboración entre 2 países aficionados al whisky con un sabor distintivo que deja un rastro de avellana.
Chivas Minzunara se inspira por el discernimiento y arte japonés integrado en el mundo del whisky. Es una verdadera muestra de la colaboración entre 2 países aficionados al whisky con un sabor distintivo que deja un rastro de avellana.
El Sandy Hyslop viajó a Japón en busca de las mejores barricas de roble Mizunara. Tras visitar una tonelería japonesa y reunirse con el maestro tonelero, se entabló una relación que sigue siendo sólida hoy en día.
Este whiksy es una mezcla realmente única. La naturaleza del roble Mizunara hace que exista mayor influencia del sabor de la barrica. Las barricas aportan también una fama de sabores aromáticos discretos a la mezcla.
Color dorado intenso.
Rico y afrutado, con aromas de pera y naranja.
Suave e intenso, con el dulzor de la miel y un toque de avellana. Tiene un acabado distintivo y picante.
Chivas Minzunara se inspira por el discernimiento y arte japonés integrado en el mundo del whisky. Es una verdadera muestra de la colaboración entre 2 países aficionados al whisky con un sabor distintivo que deja un rastro de avellana.
Chivas Minzunara se inspira por el discernimiento y arte japonés integrado en el mundo del whisky. Es una verdadera muestra de la colaboración entre 2 países aficionados al whisky con un sabor distintivo que deja un rastro de avellana.
El Sandy Hyslop viajó a Japón en busca de las mejores barricas de roble Mizunara. Tras visitar una tonelería japonesa y reunirse con el maestro tonelero, se entabló una relación que sigue siendo sólida hoy en día.
Este whiksy es una mezcla realmente única. La naturaleza del roble Mizunara hace que exista mayor influencia del sabor de la barrica. Las barricas aportan también una fama de sabores aromáticos discretos a la mezcla.
Color dorado intenso.
Rico y afrutado, con aromas de pera y naranja.
Suave e intenso, con el dulzor de la miel y un toque de avellana. Tiene un acabado distintivo y picante.
