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El Empordà es tierra de paisajes, tierra de encuentros, de tramontana y de surrealismo. Es tierra de sueños y de soñadores que rinden culto al viento y a la luna, el faro particular que cada noche les brinda dulce compañía en sus viajes de ojos cerrados a un mundo mejor. Y a los surrealistas, quienes han encontrado en esta tierra su paraíso particular, un escenario acorde a sus fantasías. Este vino es también un homenaje a la naturaleza de un territorio en el que los viticultores han sabido sobreponerse a las adversidades y forjar no sin esfuerzo un presente favorable y un futuro ilusionante. Como el que ansían los soñadores. Somiadors es un vino con esa valiente y romántica personalidad, un vino potente y con estructura, al que no le faltan los aromas de fruta madura, de confituras de fresas y melocotón, deliciosa mezcla de estas dos variedades autóctonas, cariñena y garnacha, aromas de bosque mediterráneo, tomillos y notas de clavo y otras especias. Envejecido parcialmente (70%) y durante 9 meses en barricas nuevas y seminuevas de roble francés.