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Una vieja viña de 1,34 hectáreas, que data de 1901 en un coster con orientación norte en Bellmunt del Priorat. Un paraje umbrío plantado con garnacha, samsó y variedades blancas sobre una pronunciada ladera, rodeado de encinas y pinares a una altitud escasa que oscila entre los 230 y los 280 metros. Un lugar con un cálido temperamento mediterráneo que se ve aliviado de las altas temperaturas gracias a la refrescante brisa marina que aporta una humedad fresca imprescindible en las tórridas tardes de canícula. Los suelos son pizarras de vetas añiles y verdes de carácter frío. En nariz tiene un perfume misterioso que se va definiendo como una deliciosa cereza. Una boca llena de sutilezas y matices sorprendentes. El líquido te llena la boca, en 3D pero sin sobrepeso, sin texturas espesas, se expande por doquier y se alarga. Te acaricia con la fruta muy fresca y casi crujiente y dulce. Más tarde aparece el delicioso perfume de los pétalos de las peonías. Gran, gran botella.