La carrillada ibérica de bellota es un plato típico de la gastronomía española que se prepara con la carrillera del cerdo ibérico. Esta pieza de carne se encuentra en la mejilla del animal y es conocida por su textura suave y jugosa, así como por su sabor intenso y aromático.
La carrillera se ha convertido en un ingrediente muy valorado en la cocina actual, ya que se presta para una gran variedad de preparaciones y su sabor es muy apreciado por los amantes de la carne. La carrillada ibérica de bellota es un ejemplo perfecto de cómo esta pieza puede ser transformada en un plato exquisito.
¿Para qué platos suele usarse la carrillada ibérica de bellota?
Para preparar la carrillada ibérica de bellota se utiliza la carrillera de cerdo ibérico, que es adobada con una mezcla de especias y vino tinto, para luego ser cocida lentamente en una olla con cebolla, zanahoria, ajo y otras verduras. El resultado es una carne tierna y jugosa, con un sabor que se deshace en la boca.
La carrillada ibérica de bellota se puede acompañar de diversas guarniciones, como patatas fritas, arroz, puré de patatas o verduras asadas o parmentier de limón. También se puede servir con una salsa elaborada a partir del propio jugo de la cocción, que aporta aún más sabor y jugosidad a la carne.
En la actualidad, la carrillera de cerdo ibérico se ha convertido en una carne muy valorada por los chefs de todo el mundo (como los que participaron en nuestras 10ª Jornadas gastronómicas del Ibérico Fresco de Bellota Carrasco), que la utilizan en sus creaciones culinarias más innovadoras. Además, su popularidad se ha extendido a los hogares, donde cada vez son más las personas que se animan a preparar este plato en su propia cocina.
En resumen, la carrillada ibérica es una deliciosa muestra de cómo una pieza de carne tan sabrosa y versátil como la carrillera de cerdo ibérico puede convertirse en un plato exquisito y lleno de sabor. Si tienes la oportunidad de probarla, no dudes en hacerlo. Seguro que no te defraudará.
