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Sumérgete en la esencia del Empordà con Gallina de Piel Roca del Crit , un vino tinto que encarna la visión del renombrado sumiller David Seijas , antiguo miembro del equipo de El Bulli. Este proyecto nace de la pasión de Seijas por el terruño y su deseo de expresar la singularidad de la región a través de vinos con alma.
El nombre "Roca del Crit" (Roca del Grito) evoca la historia personal de David, quien solía liberar la tensión de los intensos servicios en El Bulli gritando al cielo desde una roca cercana a los viñedos, con fantásticas vistas a la bahía de Roses. Esta conexión íntima con la tierra se refleja en cada botella.
Este vino es un coupage meticuloso de Garnacha Tintay Cariñena , cultivadas en viñedos viejos (con un mínimo de 20 años) sobre suelos graníticos que le confieren una frescura distintiva. El clima mediterráneo, marcado por la influencia de la Tramuntana, un fuerte viento del norte, imprime carácter y concentración a las uvas.
Tras la fermentación, la Cariñena realiza una crianza de 10 a 12 meses sobre sus lías en foudres de 2250L y barricas de roble francés de 500-700L de segundo y tercer uso, con tostados medios. Este proceso aporta complejidad y estructura sin enmascarar la pureza de la fruta. El resultado es un vino con una graduación alcohólica que suele rondar el 13.5%-14.5% Vol. y que contiene sulfitos.
Una Experiencia Sensorial Vibrante
Gallina de Piel Roca del Crit se presenta con un color cereza brillante y seductor. En nariz, despliega una complejidad aromática que combina fruta roja madura (cerezas, moras) con delicadas notas florales de violetas , toques especiados de regaliz de palo, granos de café y romero , y matices de hierbas silvestres y balsámicas.
En boca, es un vino carnoso y estructurado , con un tacto finamente granulado y una acidez vibrante que aporta frescura y equilibrio. La fruta se percibe jugosa, y los taninos son redondos y bien integrados, dejando un final persistente con matices de café y cacao. Es un vino con gran precisión, que logra mostrar la expresión varietal y el carácter del terruño del Empordà. Ideal para maridar con carnes rojas, carnes blancas, pescados e incluso setas como los níscalos.
Sumérgete en la esencia del Empordà con Gallina de Piel Roca del Crit , un vino tinto que encarna la visión del renombrado sumiller David Seijas , antiguo miembro del equipo de El Bulli. Este proyecto nace de la pasión de Seijas por el terruño y su deseo de expresar la singularidad de la región a través de vinos con alma.
El nombre "Roca del Crit" (Roca del Grito) evoca la historia personal de David, quien solía liberar la tensión de los intensos servicios en El Bulli gritando al cielo desde una roca cercana a los viñedos, con fantásticas vistas a la bahía de Roses. Esta conexión íntima con la tierra se refleja en cada botella.
Este vino es un coupage meticuloso de Garnacha Tintay Cariñena , cultivadas en viñedos viejos (con un mínimo de 20 años) sobre suelos graníticos que le confieren una frescura distintiva. El clima mediterráneo, marcado por la influencia de la Tramuntana, un fuerte viento del norte, imprime carácter y concentración a las uvas.
Tras la fermentación, la Cariñena realiza una crianza de 10 a 12 meses sobre sus lías en foudres de 2250L y barricas de roble francés de 500-700L de segundo y tercer uso, con tostados medios. Este proceso aporta complejidad y estructura sin enmascarar la pureza de la fruta. El resultado es un vino con una graduación alcohólica que suele rondar el 13.5%-14.5% Vol. y que contiene sulfitos.
Una Experiencia Sensorial Vibrante
Gallina de Piel Roca del Crit se presenta con un color cereza brillante y seductor. En nariz, despliega una complejidad aromática que combina fruta roja madura (cerezas, moras) con delicadas notas florales de violetas , toques especiados de regaliz de palo, granos de café y romero , y matices de hierbas silvestres y balsámicas.
En boca, es un vino carnoso y estructurado , con un tacto finamente granulado y una acidez vibrante que aporta frescura y equilibrio. La fruta se percibe jugosa, y los taninos son redondos y bien integrados, dejando un final persistente con matices de café y cacao. Es un vino con gran precisión, que logra mostrar la expresión varietal y el carácter del terruño del Empordà. Ideal para maridar con carnes rojas, carnes blancas, pescados e incluso setas como los níscalos.