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Glenmorangie The Original 12 Years es un whisky escocés single malt emblemático de la destilería Glenmorangie, reconocido por su suavidad, elegancia y equilibrio aromático.
Representa la esencia del estilo de la casa, siendo el punto de referencia para los amantes del whisky de malta de las Highlands. Su envejecimiento durante doce años en barricas de roble americano ex-bourbon confiere una textura aterciopelada, una dulzura natural y una complejidad aromática que lo hacen inconfundible. Este whisky combina artesanía tradicional con una pureza y finura excepcionales, ideal tanto para degustar solo como para maridar con postres o quesos suaves.
A la vista presenta un color dorado brillante con reflejos ámbar, limpio y luminoso.
En nariz ofrece un perfil aromático delicado y armonioso, con notas de vainilla, miel, cítricos, flores blancas y un toque de almendra y melocotón maduro.
En boca es redondo, sedoso y equilibrado, con sabores de crema de vainilla, miel, caramelo ligero y frutas tropicales, acompañados por un sutil toque de roble tostado. Su final es largo, suave y cremoso, dejando una agradable sensación dulce y perfumada.
Glenmorangie The Original 12 Years es un whisky escocés single malt emblemático de la destilería Glenmorangie, reconocido por su suavidad, elegancia y equilibrio aromático.
Representa la esencia del estilo de la casa, siendo el punto de referencia para los amantes del whisky de malta de las Highlands. Su envejecimiento durante doce años en barricas de roble americano ex-bourbon confiere una textura aterciopelada, una dulzura natural y una complejidad aromática que lo hacen inconfundible. Este whisky combina artesanía tradicional con una pureza y finura excepcionales, ideal tanto para degustar solo como para maridar con postres o quesos suaves.
A la vista presenta un color dorado brillante con reflejos ámbar, limpio y luminoso.
En nariz ofrece un perfil aromático delicado y armonioso, con notas de vainilla, miel, cítricos, flores blancas y un toque de almendra y melocotón maduro.
En boca es redondo, sedoso y equilibrado, con sabores de crema de vainilla, miel, caramelo ligero y frutas tropicales, acompañados por un sutil toque de roble tostado. Su final es largo, suave y cremoso, dejando una agradable sensación dulce y perfumada.