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Macallan 25 Años Sherry Oak es un whisky excepcional que se distingue por su elaboración meticulosa y su proceso de maduración prolongada en barriles de roble europeo impregnados de jerez oloroso. La calidad de este whisky radica en la cuidadosa selección de los barriles y el control estricto del proceso de envejecimiento, que asegura una complejidad y profundidad inigualables.
El proceso de maduración comienza con la selección de barriles de roble europeo que han contenido jerez oloroso, aportando una riqueza de sabores y aromas profundos. Durante los 25 años de envejecimiento, el whisky absorbe las características únicas de la madera y el jerez, desarrollando una complejidad aromática y una profundidad de sabor que sólo se pueden conseguir con el tiempo. Los maestros destiladores de Macallan controlan meticulosamente este proceso para garantizar que cada gota de whisky refleje la excelencia y la tradición de la marca.
El Macallan 25 Años Sherry Oak es un whisky excepcional que se distingue por su elaboración meticulosa y su proceso de maduración prolongada en barriles de roble europeo impregnados de jerez oloroso. La calidad radica en la cuidadosa selección de los barriles y el control estricto del proceso de envejecimiento, que asegura una complejidad y profundidad inigualables.
El proceso de maduración comienza con la selección de barriles de roble europeo que han contenido jerez oloroso. Aportando una riqueza de sabores y aromas profundos. Durante los 25 años de envejecimiento, el whisky absorbe las características únicas de la madera y el jerez, desarrollando una complejidad aromática y una profundidad de sabor que sólo se pueden conseguir con el tiempo. Los maestros destiladores de Macallan controlan meticulosamente este proceso para garantizar que cada gota de whisky refleje la excelencia y la tradición de la marca.
Los sabores del Macallan 25 Años Sherry Oak son intensos y elegantes. En el olfato, presenta aromas ricos de chocolate negro, pasas, naranja confitada y especias cálidas como la canela y el clavo. En boca, despliega una paleta compleja con notas de caramelo, miel, higos, y un toque sutil de roble especiado. La influencia del jerez se manifiesta con una dulzura profunda y matices afrutados. Mientras que el final es largo y persistente, dejando una sensación cálida y satisfactoria con notas de roble tostado y especias.
Maridaje
En cuanto al maridaje, se complementa perfectamente con quesos curados como el Parmesano o el Comté, que resaltan las notas especiadas y afrutadas del whisky. También es ideal con postres como la tarta de chocolate negro o el crème brûlée, que armonizan con las notas de caramelo y chocolate del whisky. Para aquellos que prefieren un maridaje salado, las carnes rojas como el solomillo mignon o el venado en la parrilla son una elección excelente. La intensidad y textura de la carne complementan la riqueza del whisky, creando una experiencia gastronómica verdaderamente inolvidable.