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El proyecto Orto Vins les puede parecer desconocido a simple vista, pero no pasa en absoluto desapercibido para aquellos quienes reconocen el nombre de Joan Asens, el enólogo que durante años trabajó codo con codo al lado de Álvaro Palacios elaborando algunas de las mejores añadas de L'Ermita, entre otros de sus grandes vinos prioratinos. Joan Asens es la cara más visible del proyecto pero no su único miembro. En Orto Vins se suman las virtudes y habilidades de cuatro socios, amigos y conocidos desde la infancia: los hermanos Jordi y Josep M. Beltran, Josep M. Jové y Joan Asens. Los cuatro han heredado la tradición vitícola de sus padres, abuelos y bisabuelos, su estima por el campo, y tras los años, también unos viñedos de gran valor y singularidad, precisamente el motivo que les llevó a unirse e iniciar conjuntamente la elaboración de vinos de la más alta calidad: una gama de cuatro vinos realmente originales que reflejan la identidad de cuatro de sus mejores viñedos, cuatro vinos etiquetados bajo el nombre de Singularitats ('Singularidades'), y la gama Orto, una serie más accesible y asequible, de vinos blancos, tintos y dulces con una excelente relación calidad-precio. Les Comes d'Orto es el vino superior, el más selecto, de esta gama de introducción. Les Comes d'Orto debe su nombre al paisaje y lo describe en sus aromas; reúne el carácter de tres fincas, tres 'comes', el nombre que los agricultores locales dan a esos terrenos llenos de ondulaciones y desniveles, pequeños valles en definitiva: la Coma Nicolau (con orientación norte), la Coma Roquera (con orientación oeste), y la Coma Gigolà (con orientación sur), tierras principalmente calcáreas y cepas viejas, de edades entres los 20 y los 90 años. Con esta diversidad y un coupage de tres variedades: garnacha (50%), cariñena (45%) y ull de llebre (5%), como se conoce aquí la tempranillo, ya pueden suponer que a este vino no le faltará complejidad; es también muy equilibrado, frutal, maduro y ligeramente especiado. Les Comes d'Orto no necesita detalladas descripciones, busca complacer y ofrecer una bonita 'postal' de estas tierras del Masroig en nuestras copas. Es un Montsant clásico, amable y honesto, elaborado por manos expertas, con una atractiva etiqueta además. Envejecido durante 12 meses en barricas de roble francés de cuarto año.