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La Botera, de Roig Parals, es una mezcla de cariñenas procedentes de cepas centenarias (80%) y cabernet sauvignon (20%). Un coupage interesante, que combina dos perfiles aparentemente opuestos: la feminidad de la cariñena y la masculinidad de la cabernet, en un resultado equilibrado, redondo y placentero, a muy buen precio. Roig Parals es una pequeña bodega familiar de Mollet de Peralada, en el Alt Empordà, formada por Santi Roig y Mariona Parals, descendientes de viticultores, modesta y discreta, poco conocida hasta que en el año 2012 Jancis Robinson dijo que su Camí de Cormes 2007 era su tinto preferido en la zona. Imaginable, el eco que su valoración sobre este monovarietal de cariñena llegó a tener. Es una bodega que trabaja muy bien, sus vinos reflejan la personalidad de la zona, tanto los tintos como su blanco y su rosado, y sus precios son asequibles; es un productor a conocer del Empordà. En nariz, es la cariñena la que define el carácter del vino, con su frutosidad y su refinamiento. Parece tímida al principio pero poco a poco va desplegando sus seductoras virtudes, ofreciendo fruta madura, notas de terruño (la parcela contiene mucha piedra de sílex), suaves balsámicos... Es una nariz sensual, acompañada de frescas notas de pimienta y notas ahumadas, más propias de la cabernet. Opuestos o no, lo cierto es que estos dos varietales son una pareja de baile perfecta en este vino, fresco y notablemente complejo (no olviden la gama de precio en la que nos encontramos). En boca, es un vino completo, con una entrada agradable, fruta madura (ciruelas maduras y frambuesas) buen cuerpo aunque ágil y fácil de beber. Un vino con tan sólo 6 meses de crianza en barrica, no muy potente pero jugoso, con la madera bien integrada, nervio y un tanino suave. Envejecido durante 6 meses en barricas de roble.