Más información

Un rosado de los que dejan huella en la memoria y que merece un lugar entre los más grandes, no sólo entre sus semejantes sino también al lado de grandes tintos y blancos. Con el Pla dels Àngels, encontrarán un gran vino, complejo, fresco, refinado y con una gran versatilidad, también para disfrutarlo solo, puro placer y seducción. Elaborado por la sabias manos de Ricard Rofes, responsable del nuevo y acertado camino emprendido en esta pionera bodega del Priorat, el Pla dels Àngels nace de la fruta de una sola finca, la de su mismo nombre, una viña de garnacha plantada a 500-600 metros de altitud sobre suelos de arcilla. Un panorama completamente distinto a lo que esta zona nos tiene acostumbrados. Aquí la garnacha crece en un entorno triplemente fresco, por la altitud, por el suelo y por las prácticas de viticultura, encaminadas a evitar la sobremaduración. Su color en copa, rosado pálido, hace intuir su delicadeza, pero engaña en cuanto a intensidad: es un rosado que impacta en nariz pero sobre todo en boca, con una potencia y una intensidad admirables, graso pero siempre con el contrapunto ágil, fresco, equilibrado y de gran finura. Es un vino serio, muy rico en aromas cítricos en un primer plano, acompañado de un fondo de fresas frescas y otras frutas rojas crujientes como las cerezas o la sandía, melocotón blanco, hierba fresca, hinojo y anisados.
Climatología del viñedo: Mediterráneo.