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Casa de la Ermita Crianza es un vino tinto excepcional elaborado en la región de Jumilla, España.
Producido por Bodegas Casa de la Ermita, este vino se elabora a partir de uvas de variedades autóctonas como Monastrell, combinadas con Cabernet Sauvignon y Tempranillo, seleccionadas cuidadosamente para garantizar la máxima calidad. Después de una crianza de 12 meses en barricas de roble francés y americano, Casa de la Ermita Crianza presenta un equilibrio perfecto entre fruta, madera y taninos, ofreciendo una experiencia de degustación rica y compleja.
Visual:
Presenta un color rojo rubí intenso con bordes granate, mostrando su crianza y madurez.
De aspecto limpio y brillante, su cuerpo es medio a robusto, lo que invita a una degustación pausada y reflexiva.
Aroma:
En nariz, Casa de la Ermita Crianza despliega una compleja gama de aromas. Destacan notas de frutas rojas maduras como cerezas y ciruelas, acompañadas de toques especiados de vainilla, clavo y pimienta negra, y un sutil fondo de cacao y tabaco.
El bouquet es armonioso y bien equilibrado, con una perfecta integración de los aromas frutales y las notas aportadas por la madera.
Sabor:
En boca, este vino tiene una entrada suave y envolvente, con una acidez bien equilibrada que aporta frescura.
A medida que evoluciona en el paladar, se perciben sabores intensos de frutas negras, junto con toques de chocolate, vainilla y especias dulces, complementados por taninos suaves y bien integrados.
El final es largo y persistente, con un retrogusto agradablemente afrutado y especiado, que invita a un nuevo sorbo.
Casa de la Ermita Crianza es un vino tinto excepcional elaborado en la región de Jumilla, España.
Producido por Bodegas Casa de la Ermita, este vino se elabora a partir de uvas de variedades autóctonas como Monastrell, combinadas con Cabernet Sauvignon y Tempranillo, seleccionadas cuidadosamente para garantizar la máxima calidad. Después de una crianza de 12 meses en barricas de roble francés y americano, Casa de la Ermita Crianza presenta un equilibrio perfecto entre fruta, madera y taninos, ofreciendo una experiencia de degustación rica y compleja.
Visual:
Presenta un color rojo rubí intenso con bordes granate, mostrando su crianza y madurez.
De aspecto limpio y brillante, su cuerpo es medio a robusto, lo que invita a una degustación pausada y reflexiva.
Aroma:
En nariz, Casa de la Ermita Crianza despliega una compleja gama de aromas. Destacan notas de frutas rojas maduras como cerezas y ciruelas, acompañadas de toques especiados de vainilla, clavo y pimienta negra, y un sutil fondo de cacao y tabaco.
El bouquet es armonioso y bien equilibrado, con una perfecta integración de los aromas frutales y las notas aportadas por la madera.
Sabor:
En boca, este vino tiene una entrada suave y envolvente, con una acidez bien equilibrada que aporta frescura.
A medida que evoluciona en el paladar, se perciben sabores intensos de frutas negras, junto con toques de chocolate, vainilla y especias dulces, complementados por taninos suaves y bien integrados.
El final es largo y persistente, con un retrogusto agradablemente afrutado y especiado, que invita a un nuevo sorbo.
