la aguja de ternera es una parte de la ternera muy jugosa y muy tierna. Se encuentra en las 5 primeras vértebras dorsales en la unión del lomo con el pescuezo. Es una pieza magra, pero tiene veta. Es perfecta para guisos y estofados y también para la plancha. Propiedades y beneficios: La aguja de ternera contiene proteínas de alta calidad. La sarcosina que contiene nos ayuda en el desarrollo muscular y a mantenerlos sanos. No aporta energía diaria. Contiene carnitina, que ayuda a metabolizar las grasas y la alanina que permite obtener energía. Es buena para después del ejercicio debido a que contiene ácido linoleico que ayuda a la recuperación de los tejidos tras un esfuerzo y mejora los músculos gracias a las propiedades antioxidantes. Las vitaminas presentes en este tipo de carne son B12 que ayuda en la producción de células rojas y la B6 que mejora el sistema inmunitario. Al ser una fuente de hierro está recomendada para personas con anemia. Contiene potasio, que nos ayuda al buen funcionamiento de nuestro organismo y en la formación de hormonas. Contiene también zinc y magnesio. El magnesio contribuye en la sintetización de las proteínas, que se traduce aportando así fuerza a los músculos. Y el zinc, gracias a sus propiedades antioxidantes contribuye al crecimiento de los músculos. Valor nutricional por cada 100 gramos: Calorías : 205 Kcal Grasa: 13,6 g Colesterol: 72 mg Sodio: 65 mg Carbohidratos: 0 g Fibra: 0 g Azúcares: 0 g Proteínas: 21,65 g Conservación y trucos: La carne cruda en trozos o filetes se mantiene entre tres y cinco días siempre en la nevera y en un recipiente hermético. Congelado aguanta hasta 12 meses. Antes de cocinarlo hay que sácalo media horas antes para que coja temperatura y no se quede dura la carne al cocinarla. Receta y usos en la cocina: La aguja de ternera puedes cocinarla a la plancha o hacer deliciosos guisos como por ejemplo un delicioso guiso con patatas y pimientos: Corta en trozos un pimiento verde y uno rojo, una cebolla, dos dientes de ajo y un tomate. Sofríe todo en una sartén, añade el tomate pasados unos 10 minutos. Agrega una hoja de laurel y un poco de pimentón. A continuación, añade dos patatas cortadas en trozos y 500ml de agua o caldo de carne. En otra sartén dora la carne, añade un vaso de vino blanco y deja cocinar. Una vez pasado el tiempo, añade el sofrito y se deja cocinar todo durante 40 minutos aproximadamente.