El té negro ayuda a la relajación de vasos sanguíneos, debido a su contenido en flavonoides, ayudando a prevenir la oxidación del colesterol bueno.
No se recomienda su consumo a hipertensos por su contenido en teina.
Modo de empleo recomendado para infusiones:
Verter el contenido de una cucharada sopera en agua hirviendo y apartar del fuego. Tapar el recipiente y dejar reposar de 8 a 10 minutos. Si son raices, cortezas o semillas, hervir a fuego lento de 2 a 4 minutos. Colar y endulzar al gusto.