{{getOldPrice()}}{{getPrice()}}
De color ámbar, limpio y cristalino, presenta aromas complejos y notas a frutos secos, como la nuez y la avellana, con matices propios de la madera. En boca es seco, suave y redondo al paladar, con un postgusto largo y persistente. El vino perfecto para completar una comida solo con vinos generosos, ya que el oloroso es un vino ideal para los platos principales, siendo un gran acompañante para todo tipo de guisos de carne.
De color ámbar, limpio y cristalino, presenta aromas complejos y notas a frutos secos, como la nuez y la avellana, con matices propios de la madera. En boca es seco, suave y redondo al paladar, con un postgusto largo y persistente. El vino perfecto para completar una comida solo con vinos generosos, ya que el oloroso es un vino ideal para los platos principales, siendo un gran acompañante para todo tipo de guisos de carne.