El Ladoix blanc es sin duda uno de los vinos más subestimados de la Côte d'Or. Con su color dorado pálido, sus elegantes aromas florales y su mineralidad, no tiene nada que envidiar a los vinos más famosos. De hecho, comparte la misma mineralidad que su ilustre vecino, el prestigioso Corton-Charlemagne. Domaine d’Ardhuy, Ladoix 2022, es un vino complejo, amplio y estructurado. Sus aromas a miel y mantequilla hacen de este vino blanco una verdadera joya borgoñona, ofreciendo una excelente relación calidad-precio. ¡Para probarlo con una tarta tatin y quedar impresionado...!