La falda de ternera es la tripa del animal y está ubicada debajo de los lomos. Es un corte de filete largo y plano. Es una pieza muy versátil y económica. Es gelatinosa y con mucho sabor. De la falda de ternera se obtiene el churrasco, que es la falda cortada en finas tiras. También se saca el vacío que es la parte baja de la falda que ya no hay costillas. Propiedades y beneficios: La falda de ternera contiene proteínas de alta calidad. La sarcosina que contiene nos ayuda en el desarrollo muscular y a mantenerlos sanos. No aporta energía diaria. Contiene carnitina, que ayuda a metabolizar las grasas y la alanina que permite obtener energía. Es buena para después del ejercicio debido a que contiene ácido linoléico que ayuda a la recuperación de los tejidos tras un esfuerzo y mejora los músculos gracias a las propiedades antioxidantes. Las vitaminas presentes en este tipo de carne son B12 ayuda en la producción de células rojas y B6 que mejora el sistema inmunitario. Al ser a fuente de hierro está recomendado para personas con anemia. El potasio nos ayuda al buen funcionamiento de nuestro organismo y en la formación de hormonas. Contiene también zinc y magnesio. El magnesio contribuye en la sintetización de las proteínas, que se traduce aportando así fuerza a los músculos. Y el zinc, gracias a su propiedades antioxidantes contribuye al crecimiento de los músculos. Valor nutricional por cada 100 gramos: Colesterol 0.64 mg Calcio 6.44 mg Hierro 2.76 mg Zinc 3.22 mg Vitamina A 18.4 ug Vitamina C 1.38 g Ácido Fólico 4.6 ug Sodio 60.0 mg Conservación y trucos: Debe de conservarse en la nevera en un recipiente hermético y consumirla antes de las 48 horas una vez comprada. Si la congelas no debe de estar más de 4 meses en el congelador. Antes de cocinarla debe dejarse fuera de la nevera para que coja temperatura ambiente. Receta y usos en la cocina: Su uso se extiende principalmente a la parrilla, horno y guisos; si la quieres hacer guisada, pocha en una olla dos ajos, una cebolla y una manzana pelada. Sofríe hasta que esté pochado todo. Dora la carne previamente salpimentada e ircoporpora a la olla. Echa un vaso de vino blanco, laurel y dos clavos. Una vez evaporado el alcohol, vierte 2 vasos de caldo, el agua de haber remojado con anterioridad los pimientos choriceros y la carne de los mismos. Cocina durante 15 minutos. Para acompañar puedes saltear unas verduras.