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3 días. Solo 3 días quedan para una de las fiestas más esperadas por los pequeños de la casa. Sí, en tres días llega halloween y aquí te queremos enseñar recetas para que te montes una fiesta por todo lo alto.
Halloween está muy cerca. El miedo va invadiendo las calles y las casas de los amantes de esta fiesta por lo que en mentta hemos decidido adelantarnos y daros algunas ideas para que lo celebréis por todo lo alto. Pero antes, un poco de historia terrorífica, ¿no?
¿De dónde viene la fiesta de halloween?
Halloween es una fiesta importada. En realidad, en nuestro país lo que se celebra de forma tradicional es la fiesta de todos los santos, un día para homenajear a todos aquellos que se fueron, que ya no están con nosotros, por eso no es motivo de fiesta. No obstante, la fiesta de halloween ha ido cobrando importancia en las sociedades occidentales. De hecho, la palabra significa en inglés es una forma de acortar la frase «All Hallow’s Eve», que significa Víspera de todos los Santos.
Según el diario El Mundo, aunque muchas personas piensen que esta fiesta tiene origen americano, lo cierto es que es una fiesta celta, de origen pagano que se celebra la noche del 31 de octubre, es decir, la víspera del día de todos los santos. Los celtas en este día celebraban el festival Samhain, que significa fin de verano. Con el culminaban la temporada de cosechas en Irlanda y daban comienzo al nuevo año celta, que coincidía con el solsticio de otoño.
Del Samhain han ido surgiendo las diferentes costumbres habituales de esta fiesta. Las típicas calabazas que se usan como candeleros tienen su origen en otras verduras, los nabos. Los celtas los tallaban e introducían velas dentro de los mismos. Lo hacían porque pensaban que estas verduras protegían a los vivos de los espíritus que erraban esa noche. Cuando la tradición se exportó a Estados Unidos, se descubrió que la calabaza era mucho más fácil de vaciar y tallar.
Además en Escocia o Irlanda los celtas se disfrazaban con máscaras para que los espíritus no les confundieran con vivos y así no pudieran invadir su vida. Hoy la tradición de disfrazarse no tiene este trasfondo, simplemente es una forma de divertirse y pasarlo bien.
¿Truco o trato?
Durante el festival celta, se hacían ofrendas de alimentos y comida como símbolo de recuerdo. Por eso halloween no es solo una fiesta de disfraces, sino también una culinaria donde la comida cobra un gran protagonismo.
Para saber por qué hoy en día sigue la tradición del «truco o trato» debemos remontarnos varios siglos atrás. Concretamente en el año 837, cuando el papa Gregorio IV movió la festividad de todos los santos que se celebraba en mayo hasta octubre, para que coincidiera con el ritual pagano y así atraer a más fieles a la iglesia. En este afán de incorporar las tradiciones paganas a las cristianas, la Iglesia adoptó la costumbre de dar caramelos a los niños que iban pidiendo puerta a puerta disfrazados.
Los niños pedían caramelos y a cambio rezaban por aquellos que se los daban. Los pobres empezaron a pedir comida por las casas a cambio de lo mismo, pedir y orar por aquellos que les ayudaban. Era dar o recibir agravio, lo que hoy ha derivado en el truco o trato. La única diferencia es que si hoy no das golosinas a los niños que te piden puedes acabar con unos huevos estampados en tu fachada.
Las recetas más escalofriantes
- Dedos de zombie: probablemente el plato más sencillo de preparar para tu fiesta. Solo necesitas salchichas almendras laminadas y ketchup. La preparación es muy fácil. Cocina las salchichas a la plancha hasta que adquieran un color un poco tostado. Haz un corte en uno de los lados simulando la comisura de las uñas de las manos y ahí coloca una almendra laminada como si fuera la uña. Haz diversos cortes en la salchicha simulando las falanges de los dedos y añade ketchup como si fuera sangre. Fácil, rápido y escalofriantemente delicioso.
- Ojos sangrientos: Para prepararlos hay que cocer tantos huevos como queramos y partirlos por la mitad. Separamos la yema. Con ella y con atún y tomate haremos una mezcla para rellenar los huevos. Una ves hecha emplatamos en la clara de forma que parezca un globo ocular sangriento y coronamos con una aceituna que simule la pupila y el iris. En la siguiente foto te harás una idea de lo bien que queda.
- Sangre de vampiro: esta es la mejor idea para el postre de tu fiesta de halloween. Para elaborarla necesitamos 1kg de frutos rojos, 500 gramos de azúcar y zumo de limón. Juntamos todos los ingredientes en un molde para hornear y calentamos a 170 grados. Después se bate la mezcla y se queda una textura de sangre gelatinosa deliciosa, como una mermelada.
- Calabaza: quizás esta no sea una receta tanto para comer sino para decorar tu fiesta. Como explicarlo con palabras es un poco complicado, os dejamos el siguiente vídeo para que veáis cómo se elabora:
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