Principalmente compuesto de agua, el pimiento rojo es una hortaliza que aporta pocas calorías, tiene un bajo contenido de grasas y proteínas, se caracteriza por ser buena fuente de vitaminas, minerales y fibras.
Entre estos nutrientes destacan el potasio, importante para los músculos y la transmisión de los impulsos nerviosos; el magnesio, que además ayuda al buen funcionamiento del intestino y del sistema inmune; el calcio y fósforo, que aportan a la salud de dientes y huesos. Al ser rico en fibras y tener diferentes nutrientes con propiedades antioxidantes, el pimiento rojo es un muy buen alimento en la prevención del cáncer, diabetes, colesterol alto y enfermedades al corazón.
Aporta gran cantidad de vitamina C, tanto así, que llega a tener incluso, más del doble que las naranjas o las frutillas. Ésta influye en la formación de huesos, dientes, glóbulos rojos y colágeno. Además, favorece l absorción de hierro de los alimentos y mejora las defensas frente a infecciones. Sin embargo, es importante comerlo crudo para que no pierda sus propiedades.
Prácticamente todas las vitaminas están presentes en el pimiento rojo, salvo la B12 que se obtiene sólo de los productos de origen animal. Al tener un alto nivel de potasio y bajo de sodio, los pimientos rojos ayudan a eliminar líquidos del cuerpo con el aumento de producción de orina.