Los purés y las cremas son un buen sustituto de los sólidos. Además de tener casi el mismo valor nutricional que sus alimentos, son mucho más fáciles de ingerir, y permiten la combinación de muchos alimentos diferentes. En mentta hemos hecho una selección de algunas cremas caseras suaves y nutritivas, ya elaboradas, para que no pierdas el tiempo en la cocina y te limites a disfrutar de su sabor y textura.
Cremas de Bon Gourmet
La crema de alcachofas de Bon Gourmet tiene un sabor suave, y conserva todas las propiedades de la alcachofa. La alcachofa es una hortaliza rica en fibra y vitaminas, y posee fitoesteroles, que contribuyen a controlar los niveles de colesterol y triglicéridos en sangre. Además contribuye a una diuresis regular, eliminando retención de líquidos y toxinas, y tiene un bajísimo aporte calórico: 44 kcal por cada 100 g.
Esta crema se corona con un toque de aceite de gamba, y es perfecta para acompañarla con picatostes o trocitos de jamón crujiente.
Para los amantes del marisco, Bon Gourmet también ofrece su crema de bogavante. Elaborada con productos del mar de alta calidad como quisquillas, bogavante y colas de gambón, esta crema reúne todo el sabor y las propiedades del marisco, con una textura suave y ligera. El toque de brandy le aporta cuerpo y combina a la perfección con el intenso sabor a mar que ha conseguido Bon Gourmet.
Cremas de Vitaliv
Con un aporte calórico de tan solo 16 kcal por cada 100g, las espinacas son el mejor aliado para una dieta hipocalórica o simplemente equilibrada. Su alto contenido en ácido alfalipoico ayuda a controlar los niveles de insulina en sangre, y tienen un alto índice de betacarotenos (agente anticancerígeno) y ácido fólico, esencial para la formación de los huesos y el sistema inmunológico. Además de comerlas en sólido, rehogadas o incluso en tortillas, puedes probar la crema de espinacas que ha elaborado Vitaliv: una crema suave, libre de gluten y lactosa, y con pocas calorías. Puedes elegir más sabores en el apartado de este proveedor.
Cremas de Mi Marmita
Si lo que buscas es un primer plato nutritivo y completo, las cremas de Mi Marmita son una gran opción. La crema de calabacín y quinoa que ha elaborado la casa tiene una textura muy suave, y un sabor ligero, potenciado por el toque de cúrcuma. En esta crema se mezclan varios productos de la huerta, así como sus nutrientes: el alto nivel de proteínas de la quinoa, así como el aporte vitamínico del calabacín, hacen de esta crema un primero perfecto.
Mi Marmita también ofrece, entre otros platos caseros preparados, su aclamada crema de zanahoria y jengibre. Con un alto contenido en potasio y fósforo, la zanahoria alivia el estreñimiento y contribuye al buen funcionamiento del sistema respiratorio y cardíaco. Además, esta hortaliza es conocida por sus beneficios para la vista. Por su parte, el jengibre ayuda a mejorar el sistema inmunológico y es un gran acelerador del metabolismo.
Cremas de Gastrotup
Gastrotup, además de unos platos preparados exquisitos, presenta sus cremas caseras, como la crema de shiitake. El shiitake contiene el mayor aporte de fibra de todas las setas cultivadas. Además, posee fructooligosacáridos poco comunes en la dieta, que benefician el desarrollo de las bacterias intestinales beneficiosas. Esta crema, aromatizada con aceite de trufa y elaborada solo con ingredientes naturales, mantiene todo el sabor tradicional de la seta shiitake.
Cremas de Comer con Luis
Los espárragos trigueros tienen muchas propiedades diuréticas. Con apenas 120 kcal, la crema de trigueros de Comer con Luis es una buena opción para consumir esta planta herbácea tan beneficiosa para nuestra salud. Además de una cantidad muy alta de fibra, los trigueros son ricos en vitaminas A, B1, B2, B6 y C, y en minerales como el magnesio. En Comer con Luis encontrarás una variedad de cremas caseras y purés de verdura, como esta deliciosa y ligera crema de trigueros.
