5 consejos profesionales para hacer buenas fotos de comida

El día 19 de agosto está marcado en el calendario de los amantes de la fotografía como una fecha importante del año al celebrarse el Día Mundial de la Fotografía. Desde mentta queremos hacer nuestro pequeño homenaje recopilando algunos de los mejores consejos profesionales en la especialidad que más nos gusta: la fotografía gastronómica, una tendencia que cada vez tiene más y más adeptos gracias, entre otras cosas, al auge de las nuevas tecnologías como los smartphones, que permiten hacer cada día mejores instantáneas.

Al hilo del este tema, merece la pena destacar una de las últimas tendencias que más popularidad tiene en las redes sociales, el Foodporn, una corriente creativa que apuesta por abrir el apetito con fotos altamente sugerentes que despiertan el sentido más primario del ser humano en cuestión de milisegundos.

Consejos para mejorar tus fotos de comida

• 1º Lo primero, pensar bien la foto

  Raquel Carmona, fotógrafa gastronómica y autora del blog Los Tragadalbas, recomienda como primer paso pensar bien la fotografía. O lo que es lo mismo, no ponerse a disparar a las primeras de cambio. Conviene dedicar unos minutos para planificar cuáles van a ser los elementos protagonistas, de qué manera los vamos a colocar y qué colores estamos usando.

  

  En este sentido, recomienda combinar colores primarios como el rojo con tonos neutros como un beige para conseguir un equilibrio visual y no un efecto discotequero multicolor que haga daño a la vista y desvíe la atención de nuestros elementos protagonistas.

• 2º La importancia de los detalles

  Otros profesionales en el mundo de la imagen son los El blog del Fotógrafo. En esta entrada relacionada con la fotografía gastronomía, Mario Pérez destaca el hecho de dar visibilidad a los detalles, como por ejemplo la marca de la parrilla en un filete de carne.

  Fuente de la foto: Rubixe foto

  También hace hincapié en escoger los mejores alimentos que tengamos ya que de por sí lucirán más. A principios de siglo XX, hacerse una fotografía era toda una ceremonia que estaba reservada a aquellos que podían permitírselo.Por eso, se engalanaban con sus mejores ropas para salir inmortalizados de la mejor forma posible. En las fotos de comida ocurre igual, hay que elegir siempre los

• 3º Cambiar de ángulos

  Otra de sus sugerencias que hacen desde el Blog del Fotógrafo es no intentar centrarse solamente en una misma perspectiva, sino que hay que moverse y cambiar de ángulo para probar nuevos enfoques. De esta manera será más fácil encontrar LA FOTO que buscamos.

  

  En este sentido, Javier Lucas en Dzoom aconseja jugar con las líneas y con las simetrías, además de utilizar objetivos macro (como podría ser un 50-300) o probar a hacer desenfoques.

• 4º ¿Qué equipo necesito?

  Una de las preguntas más recurrentes. Si tenemos una cámara réflex o una mirrorless mejor que mejor (preferible con objetivo de larga distancia como 50-200) , aunque hoy en día se pueden hacer auténticas maravillas con las cámaras que incorporan los smartphone de última generación.

  

  Más allá de la cámara, necesitaremos alguna cosita más si queremos dar un salto de calidad a nuestras fotos. Los «basics» que utiliza la profesora culinaria Sonia Martín, autora del blog A qué saben las nubes, son: un trípode, para evitar trepidaciones al hacer fotos de larga exposición, y varias cartulinas blancas para reflejar la luz. Obviamente si podemos permitírnoslo, podemos optar por reflectores de luz y algún foco, aunque lo ideal es utilizar al máximo la luz natural.

  La mayoría de los foodies amantes de la fotografía gastronómica coinciden en que usar la madera (sobre todo la que es imperfecta y le da un toque rústico y casero a la instantánea) como elemento base es un acierto en el 99% de los casos.

• 5º Dar dinamismo a la foto

  Otro consejo que recogen en Dzoom es el de intentar dar dinamismo a las fotografías de comida. Si usamos elementos como frutos secos o alguna pieza de fruta sería una buena idea hacer una foto mientras se sumerge en  agua o en leche, por ejemplo. Para conseguirlo, acuérdate de hacer la foto con una velocidad de obturación alta.

  

  Aunque hay muchas otras formas de darle dinamismo a nuestras fotos. No hay más que ver la instantánea de Mark Benham ganadora del prestigioso premio  Pink Lady Food Photographer Of The Year 2016

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