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Los anacardos, también llamados acajú, marañón o nuez de cajú (en Argentina), son uno de los frutos secos más consumidos hoy en día Europa por sus condiciones nutritivas excepcionales y su peculiar sabor. Su origen, características, su supuesta toxicidad, sus propiedades o su penetración actual en el mercado mundial son algunos de los temas que hemos recopilado buscando respuestas en páginas especializadas o de contrastada reputación. Además, las propiedades de los anacardos son mucho más ricas que las de otros frutos secos. ¿Quieres más información? ¡Sigue leyendo!
¿De dónde vienen los anacardos?
Los anacardos son un árbol originario del sur de Venezuela y del nordeste de Brasil. Necesita un clima tropical húmedo, que va entre los 20 y los 30 °C. Fue descubierta por los colonizadores portugueses a su llegada a lo que hoy conocemos como Brasil en el siglo XVI. Gracias al comercio de la metrópoli con India, se introdujo a partir de ese siglo en Asia, siendo hoy un fruto muy arraigado en buena parte del continente.
A pesar de que Brasil ha sido históricamente el país productor por excelencia del anacardo, en 2015/2016 India lidera la producción con un 25%, por delante de Costa de Marfil (23%) y de Vietnam (15%). Brasil actualmente supone un 5%, quedando así lejos del podium.
¿Las propiedades de los anacardos son buenas para perder peso y tienen beneficios para la salud?
Esta es una de las preguntas del millón. Como refleja este post de la web especializada Ellahoy, uno de las principales virtudes de las propiedades de los anacardos es su gran cantidad de ácidos grasos monoinsaturados y poliinsaturados, lo cual significa que no se acumulan como grasa a metabolizar de manera muy rápida. Por tanto, sí son recomendables si nuestro objetivo es adelgazar.
Además, tienen un importante aporte de hidratos de carbono complejos o de absorción lenta, lo que favorece que los niveles de azúcar en sangre se mantengan estables y que la sensación de saciedad perdure más tiempo. También son ricos en ácidos grasos Omega 6, los cuales ayudan a a regular los niveles de colesterol y de triglicéridos.
Dado su alto aporte energético, es un fruto seco perfecto para deportistas y para dietas de adelgazamiento siempre y cuando se controle la cantidad ingerida. Hay que tener en cuenta que los anacardos tienen 574 calorías por cada 100 gramos y que 30 gramos equivalen a unos 20 anacardos, cantidad que debería ser suficiente para la mayoría de los casos.
¿Los anacardos crudos son tóxicos?
Sí, los anacardos crudos son tóxicos pero hay que matizarlo, ya que no debería afectarnos. Lo primero, porque los que se comercializan en supermercados y otros establecimientos de alimentación como mentta sí son «crudos» según su nombre y descripción, pero no tóxicos, ya que han sido tratados antes de lanzarse al mercado. Según detalla este artículo de El Confidencial, el elemento dañino para nuestra salud es el urushiol, un tipo aceite que se encuentra en las hojas del árbol del anacardo y en la cáscara de la nuez y que es el causante de la dermatitis provocando así edemas, inflamación o supuración. Es además, el mismo componente que encontramos en la hiedra venenosa.
Los anacardos crudos que compramos no son realmente así, ya que han sido cocidos previamente para eliminar esta sustancia tóxica. A no ser que estés trabajando en una plantación de anacardos o encuentres alguno silvestre, no hay riesgo alguno de que te encuentres con un anacardo realmente crudo. Eso sí, debes saber que su ingesta en grandes cantidades puede llegar a ser mortal, una de las propiedades de los anacardos más negativas.
Consumo de anacardos por países
Según este gráfico elaborado por International Nut&Diet Fruit con el objetivo de analizar el consumo de anarcado por países en los últimos años, veremos el arraigo que tiene este fruto seco en las dietas de grandes países asiáticos,como China, India o Indonesia, pero también en otros occidentales como Estados Unidos, Alemania, Holanda, Francia o España, que a pesar de ocupar el decimosexto puesto de la tabla, ha visto incrementar su consumo en el último año de medición (2013).
En la primera columna se muestra el consumo total durante ese periodo de tiempo; en la segunda, los kilos por persona aproximados; y en la última, el porcentaje de la población de ese país que come anarcados.
¿Los frutos secos alargan la vida?
Eso es precisamente una de las conclusiones a las que llegó el estudio «New England Journal of Medicine» respecto a las propiedades de los anacardos y del que se hizo eco Europa Press. La prueba se realizó entre 76.464 mujeres en el ‘Estudio de Salud de las Enfermerdad’ y 42.498 hombres en el ‘Estudio de Seguimiento de Profesionales de la Salud’. El objetivo era determinar la relación entre el consumo de frutos secos con la mortalidad total y por causas específicas.
Así, el estudio confirma que el consumo de frutos secos como los anacardos, almendras, avellanas, piñones, pistachos o nueces está asociado a la mortalidad total de hombres y mujeres, dejando a un lado otros factores relacionados con la muerte. Su autor, Ying Bao, decía que los individuos que comían frutos secos (ración de 28 gr) entre siete o más veces por semana tenían una tasa de mortalidad un 20 por ciento menor».
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