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El polen es una fuente rica en proteínas que posibilita la formación y estructuración de los tejidos larvales de la cría de abeja. Por este motivo el polen será almacenado en las celdas que envuelven el nido de la cría como ayuda protectora de las abejas enidadoras.
La abeja es la encargada de recoger el polen de las estambres de las flores. Las visitas sin parar de éstas, hace que el polen se disperse y garantice una mejor semilla; es lo que llamamos polinización
La abeja es un insecto muy peludo facilitando de esta manera la recojida de polen. Unos cepillos y peines localizados en su tercer par de patas le ayudan mucho en su trabajo. La abeja almacenará todo el polen utilizando una pega a base de néctar que lleva en su cabeza. El resultad de esta actividad será la fabricación de una bola de polen.
Antiguamente le atribuían propiedades como reconstituyente, revitalizante, próstata
ORIGEN: España y otras áreas de la Península Ibérica. ESPECIE REPRESENTATIVA: Flora arbórea autóctona. COMPOSICIÓN FLORAL MAYORITARIA: Zarzamora, Castaño, Retama y Flora silvestre autóctona variada. ÉPOCA DE PRODUCCIÓN: Primavera tardía hasta final de verano. COLOR: Multicromático de tonalidades vivas predominando, según origen floral, pigmentos amarillentos, anaranjados y verdosos. SABOR: Provee múltiples sensaciones florales intensas. AROMA: Contundentemente floral y seco en primera instancia, prolongándose su esencia en el tiempo. PECULIARIDADES: Sustancia cruda, pura, no homogeneizada, no filtrada, sin azúcares añadidos. CONSERVACIÓN: Mantener en lugar seco, oscuro y fresco para mantener intactas todas sus cualidades de un modo natural. **En su proceso natural, la miel cristaliza y endurece en función de diversos parámetros (temperatura, origen floral, etc.