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Contribuye a mantener la función del tracto urinario.

El Diente de león es planta perenne con flores hermafroditas de un color amarillo dorado que la hacen fácilmente identificable y extendida prácticamente por todos los continentes. Se la considera mala hierba o "maleza". Su raíz contiene abundantes sales potásicas (5%) e inulina (2%, que se concentra hasta un 40% en otoño). También contiene lactonas sesquiterpénicas, alcoholes triterpénicos, fitosteroles y mucílagos (1%). Sus hojas contienen lactonas sesquiterpénicas, triterpenos, fitosteroles, flavonoides y abundantes sales potásicas (hasta un 5%).

Tradicionalmente, el diente de león se ha utilizado como diurético, colerético y colagogo. Es depurativo y laxante suave. Se han estudiado las propiedades antidiabéticas del diente de león, atribuidas al ácido chicórico, el taraxasterol, el ácido clorogénico y las lactonas sesquiterpénicas, con resultados prometedores.

PRINCIPALES INDICACIONES

• Disquinesia hepatobiliar (estimulación de las funciones hepática y biliar), dispepsia, pérdida del apetito.
• Diurético y coadyuvante en afecciones urinarias leves.
• Trastornos digestivos leves, como sensación de plenitud, flatulencia y digestiones lentas, así como en la pérdida temporal del apetito.