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El aceite arbequina aromatizado con guindillas, cayena, pimienta blanca y negra, con que le aporta un toque picante y un leve amargor propio del aceite de oliva virgen extra, más que un ingrediente adicional podríamos decir que actúa como un condimento, que potencia los sabores.

Una de las claves es conseguir un equilibrio, que persista suavemente en la boca, sin que enmascare o elimine el resto de los sabores presentes.

Extracción en frío, conserva todas la cualidades en estado más natural, sin filtrar.

Presentado en botella de cristal de 500ml.

Elaborado por Agustín Fornos en Trasmoz (Zaragoza).