Más información

La ajedrea, que es denominada también hierba de olivas, cosa que ya sugiere uno de sus usos principales. Además de olivas, sirve por confitar setas, pimientos dulces, pepinos...También combina bien con los guisos de carne y las legumbres. Es también una hierba bien nuestra, que crece en estado salvaje en nuestras comarcas.

En medio de las comarcas de l’Urgell y la Segarra, entre tierras de castillos y fuentes. Tierras de campesinado. Dónde la actividad agrícola ha sido la cuna de nuestra cultura y nuestra historia. Bernau
Herbes de l’Urgell, es la respuesta a las inquietudes y dinamismo en la implantación de cultivos alternativos a los tradicionales de cereal, almendros y olivos de nuestra comarca. Un buen conocimiento del medio, maquinaria adecuada y nuestra experiencia agrícola, nos ha permitido el cultivo de un amplio abanico de especias vegetales para uso medicinal y aromático. Unas buenas prácticas agrícolas, trazabilidad en todos los procesos y un esmerado respeto por nuestro medio ambiente nos permite hoy ofrecer un producto, libre de herbicidas y pesticidas, de gran calidad en principios activos,sabor y aspecto.
Son plantas aromáticas y medicinales, cultivadas en las tierras de l’Urgell y la Segarra; en el valle del río Ondara, de paisaje diverso y singular y rindiendo tributo al castillo de Fonolleres. Un sol abrasador en verano y un gélido invierno, hace que de esta climatología tan adversa consigamos una admirable combinación de tierras de cultivo. Son tierras ancestrales, crecidas en la sombra del pasado entre olivos, almendros y pastos, enriquecidas con tecnologías de última generación para la conservación y equilibrio del entorno. Todo este conjunto, hace que hoy podamos producir plantas aromáticas y medicinales, con rigurosos controles en la producción y elaboración. Infusiones naturales, especias para condimentar y mieles. Un amplio y variado surtido de productos propios.
Albas frías, secos mediodías, puestas de sol esplendorosas y noches húmedas nos acompañan en primavera y verano. Rodeada de cereal, la naturaleza con su sorprendente vitalidad ve crecer nuestros cultivos. Un amplio surtido de plantas llenas de color, olor y sabor. Así son nuestros productos.