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El salmón es un tipo de pez que pertenece a la familia Salmonidae, y es muy popular por su carne sabrosa y nutritiva. Existen varias especies de salmón, pero las más conocidas son el salmón del Atlántico (Salmo salar) y el salmón del Pacífico (Oncorhynchus), que incluye especies como el salmón Chinook, Sockeye, Coho, entre otros.
Alta fuente de proteínas: El salmón es rico en proteínas de alta calidad que son esenciales para el crecimiento y la reparación de tejidos.
Ácidos grasos omega-3: El salmón es especialmente conocido por ser una excelente fuente de ácidos grasos omega-3, que son beneficiosos para la salud cardiovascular, el cerebro y la reducción de la inflamación.
Vitaminas y minerales: Contiene vitaminas del grupo B (especialmente B12 y niacina), vitamina D, y minerales como el selenio y el potasio.
Bajo en grasas saturadas: Aunque es graso, las grasas del salmón son mayormente saludables, sobre todo los omega-3, lo que lo hace ideal para una dieta equilibrada.
Salmón del Atlántico: Es el más comúnmente disponible en mercados y restaurantes. Generalmente se cría en granjas acuáticas.
Salmón Sockeye: Tiene un color rojo brillante y un sabor más fuerte.
Salmón Chinook: Es el más grande y suele tener un sabor suave y una textura más grasosa.
Salmón Coho: Tiene una textura firme y un sabor delicado.
Los principales países productores de salmón, especialmente de salmón atlántico, son:
Noruega: Es uno de los mayores productores y exportadores de salmón del mundo.
Chile: También es un gran productor de salmón, especialmente en granjas acuáticas en sus costas.
Escocia: Produce salmón de alta calidad, con un sabor distintivo.
Canadá: Es otro de los grandes productores de salmón, especialmente en las regiones del Pacífico.
Islanda: También es conocido por su producción de salmón, aunque en menor escala.
El salmón es muy versátil y se puede consumir de varias formas, entre ellas:
A la parrilla o a la plancha: Marinado con hierbas y aceite de oliva, o simplemente con sal y pimienta.
Ahumado: Ideal para incluir en ensaladas, bagels o acompañar con queso crema.
Al horno: Con salsas, especias o incluso envuelto en papel de aluminio para mantener la humedad.
Crudo: En sushi o tartar, cuando es de buena calidad (salmón fresco de confianza).
En conserva: El salmón enlatado es práctico para ensaladas o pasteles.